Los Crepes
Con azúcar, chocolate, mermelada o simplemente sin relleno, nuestros crepes se pueden servir calientes o fríos, tanto de primer plato como de postre.
Los crepes de saraceno
Históricamente, el típico plato del campesino bretón.
Muy sabrosos con un toque de mantequilla o rellenos de jamón, beicon, champiñones, según los
gustos, los crepes de trigo negro o sarraceno encantarán a todos, hasta encandilar a los más exigentes…
Muy bajo en calorías y sin gluten, el crepe de sarraceno también es ideal para dietas hipocalóricas
así como para alérgicos a la harina de trigo.
Los blinis
Consumidos en frío o en caliente, deje su imaginación disfrutar de todas las posibilidades propias de los blinis : será un complemento en sus platos (salmón ahumado, caviar…), una suave base para sus mejores canapés, un tentempié discreto y dulce , un divertido soporte para sus patés y cremas, …
Las aumônières
Nuestras aumonieres esconden magnificas sorpresas.
¡ Es imposible resistirse a la tentación !